Frase o Cita de esta semana:

"Nacer es el comienzo de un viaje que la muerte no detiene, por el contrario, esa transformación, esa liberación le permite al alma liberarse del cuerpo, esto permite seguir el viaje hacía la eternidad donde nos encontraremos con nuestra Divinidad"
Time of Metanoia

31 de marzo de 2013

Los misterios de Jesús y el libro secreto de Juan

Y él dijo: A vosotros os es dado conocer los misterios del reino de Dios; pero a los otros por parábolas, para que viendo no vean, y oyendo no entiendan. Lucas 8:10 

¿Qué razón en particular tenía Jesús para hacer esta declaración a sus discípulos? 
En el escrito anterior (haga clic en enlace)
Las simientes, la creación antes del Génesis
repasamos las revelaciones de Dios a Juan sobre la creación original, el Dios del Génesis y el mundo imperfecto en que vivimos creado por Jaldabaoz  (Yaltabaoth)  el primer gobernante.

En Diciembre del año 1945 en el Alto Egipto, cerca del pueblo de Nag Hammadi: unos campesinos hallaron trece códices de papiros forrados en cuero y enterrados en vasijas selladas, en total más de 1,100 páginas de antiguos manuscritos, 52 textos en total estaban escritos en copto (idioma egipcio). Los Evangelios Apócrifos (prohibidos) o Gnósticos (de conocimientos) permanecieron 1,600 años enterrados. Aunque muchos de los escritos de estos evangelios ya se conocían a través del Nuevo Testamento, sin embargo, la interpretación que se le daba era completamente diferente a la interpretación que se le daba en el Nuevo Testamento. Sus contenidos narran la niñez de Jesús, su relación con María Magdalena, la creación original e infinidad de temas no considerados en la Biblia, 
¿Por qué se nos ha negado el conocimiento de los evangelios originales "secretos" de Pedro, María Magdalena, Juan , Felipe, entre otros? Las razones que tiene la Iglesia pueden ser varias, primero, la importancia que otorgan estos textos al liderazgo de la mujer en la Iglesia, lo que no era permitido en la comunidad e Iglesia romana y que permanece hasta hoy día. Segundo, la Iglesia alega que los evangelios apócrifos o gnósticos no fueron redactados por inspiración divina… ¿Qué? ¿Quién lo determinó? Los romanos, estos textos fueron dictados por la fuente original, Jesús personalmente le habló a los discípulos, la inspiración fue directa sin editar y sufrir los cambios o presiones políticas de la época y el tiempo.

En el Evangelio de Tomás, por ejemplo dice; 
"Estos son los dichos secretos que pronunció Jesús el Viviente y que el mellizo Judas Tomás puso por escrito”. 

Estos textos nos indican que son los textos “secretos” de personas que andaban con Jesús, (los gnósticos) a diferencia de los escritos del Nuevo Testamento que fueron adaptados por el emperador Constantino para su uso con fines políticos y de unión para el Imperio Romano. Estos textos encontrados en Nag Hammadi ponen de manifiesto la pugna entre los religiosos vs los cristianos originales que luego fueron llamados herejes…¿Por quiénes? Por los romanos, estos les llamaban herejes a pesar de que “gnosis” significa conocimiento, a los herejes se les llamaban los “gnósticos”. Entre esos textos “secretos” de distintos acompañantes de Jesús, que la iglesia posteriormente les llamó Apóstoles está El libro secreto de Juan, el Apóstol. De la autoría de Juan la Biblia cuenta con dos de sus libros y tres de sus cartas, entre ellos el último libro, Revelaciones, estos fueron incluidos por los editores o escribas de la Biblia que estaban bajo el mandato del emperador Constantino que fungió como el principal editor, éste no incluyó el libro “secreto” de Juan, entre otros.

Todo este concepto de “secreto” me recuerda las palabras de Jesús escritas por el Apóstol Lucas en su Evangelio; Y él dijo: A vosotros os es dado conocer los misterios del reino de Dios; pero a los otros por parábolas, para que viendo no vean, y oyendo no entiendan. Lucas 8:10. Esto nos hace pensar que en efecto había unos misterios que fueron dados exclusivamente de forma secreta a unos. ¿Por qué? ¿Por el asunto de las dos simientes?*
(*Haga clic para leer Las simientes, la creación antes del Génesis)

Video sobre los textos encontrados, los apócrifos


El libro secreto de Juan 
El libro secreto de Juan se encuentra en los Códices III y IV de los encontrados en Nag Hammadi. Es un texto de enseñanzas gnósticas del siglo II d. C. Describe una aparición de la divinidad a Juan el Apóstol, el Gnóstico, cuando estaba en un lugar solitario haciéndose preguntas acerca la venida de Cristo al mundo. En la aparición, Juan recibe una enseñanza "secreta" de Dios, que se presenta como el Padre, la Madre y el Hijo. La enseñanza que recibe Juan debe ir destinada a “la raza inquebrantable del Hombre perfecto”. O sea, a aquellos que buscan la verdad y quieren mejorar mediante el conocimiento. 

Historia de los gnósticos y la persecución del emperador Constantino 
La palabra "gnóstico" viene del griego "gnosis", que se traduce por "conocimiento". Se trata aquí de un conocimiento interior que lleva a la salvación del individuo, una experiencia interna con la que se alcanza el conocimiento de Dios. El consejo a seguir por todo seguidor del gnosticismo es el de "hombre conócete ti mismo y conocerás a Dios", inscripción que se podía leer en las puertas de los templos griegos. Para los gnósticos, Jesús vino al mundo a enseñar el camino hacia este tipo de conocimiento. 

Los textos religiosos gnósticos proponían interpretaciones diferentes a los oficiados en su tiempo, y fueron declarados heréticos. A partir de la conversión de Constantino al cristianismo la mera posesión de un libro herético se consideraba delito y los ejemplares encontrados se destruían. Por eso, probablemente, los libros encontrados en Nag Hammadi se apartaron de la circulación y fueron escondidos por los seguidores del movimiento gnóstico en las vasijas de barro en las que fueron hallados en 1945. 

Los gnósticos, como hemos dicho, enfocaban las cosas religiosas o divinas como un conocimiento interior y secreto, transmitido por la tradición y por la iniciación. No daban mucha importancia a la historicidad, sino más bien al sentido esotérico. Los textos que podrían considerarse como evangelios, en su mayoría, son dichos de Jesús. No se parecen mucho a los evangelios canónicos, pues no presentan una narración de la vida de Jesús, sino que contienen revelaciones secretas que hizo éste a sus discípulos. 

Gracias a estos manuscritos se sabe ahora que entre los gnósticos y los llamados ortodoxos o Iglesia hubo bastante polémica. Unos a otros se acusaron de ser la falsa Iglesia de Cristo. Las diferencias entre ambos grupos se fue haciendo cada vez más evidente. Mientras que para los ortodoxos bastaba cumplir ciertos requisitos para entrar a formar parte de la Iglesia, como confesar el credo, aceptar el ritual del bautismo, participar en el culto y obedecer al clero, para los gnósticos era bien diferente: exigían pruebas de madurez espiritual para demostrar que se pertenecía a la Iglesia de Cristo o Iglesia Verdadera. De hecho, el bautismo para ellos significaba muy poco o nada, si no va acompañado de un arrepentimiento verdadero demostrado con hechos: "Por sus frutos los conoceréis". 

La antigüedad de los manuscritos 
Según los estudios y la datación realizada examinando el papiro utilizado para dar espesor a las encuadernaciones en cuero y la escritura copta, se sitúa alrededor del año 300 ó 400 d. C. aproximadamente. No obstante, muchos investigadores no están de acuerdo con estas estimaciones y sitúan su antigüedad entre los años 120-150 d. C., ya que, hacia el año 180 d. C., Ireneo de Lyon declaró que los llamados herejes afirmaban poseer más evangelios de los que se cononocían. 

La antigüedad del Evangelio “secreto” de Tomás por ejemplo se remonta hasta el año 140 d. C. De hecho, hacia la mitad de siglo II de la era cristiana, muchos textos fueron denunciados como heréticos. Entre ellos estaban los encontrados en Nag Hammadi. Se sabe que en estos primeros tiempos del cristianismo muchos seguidores de Cristo fueron denunciados, perseguidos, condenados y hasta asesinados. Pero los que seguían la doctrina de estos textos no se consideraba a sí mismos como herejes al contrario los portadores de la verdadera palabra de Dios dichas por Jesús, que los romanos de decían el zelote (un revolucionario político-nacionalista), sin embargo luego lo declararon divinino.

En nuestro próximo escrito "Cuando la iglesia declaró a Dios a Jesús" exploramos ese momento de la historia.
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