Partiendo de la célebre frase “Dale a César lo que es de César y a Dios lo que es de Dios…
Los mensajes de Jesús y de muchos sabios que ha tenido la humanidad con el paso de sus generaciones ha quedado en el olvido debido al sistema y estilos que la humanidad ha elegido para vivir. Aunque en este escrito nos referimos a USA, no es menos cierto que esta situación impera alrededor del mundo no desde ahora sino antes de que Jesús llegara a la tierra. Las prioridades de algunos gobiernos no son necesariamente la de su gente, la de su pueblo…
Posiblemente en esa ecuación le hemos dado más a César que a Dios… en esa voluntaria o involuntaria división se mantiene un balance que sin duda afecta a unos más que a otros. Veamos los dos estudios realizados en dos campos importantes del presupuesto de Estados Unidos. Estos dos estudios realizados sobre la situación en USA muestran un enorme contraste entre sus prioridades militares y la pobreza en el país.
Para este año 2011 los gastos militares de Estados Unidos superarán los 700 mil millones de dólares, mientras que en la actualidad representan el 43% del total a nivel mundial, indicó un estudio reciente del Instituto para la Investigación para la Paz de Estocolmo (Sipri). En el estudio también se señala que Estados Unidos sigue siendo el principal comprador de armas durante 2010, luego de haber mantenido un incremento anual promedio de 7.4% entre 2001 y 2009.
A pesar que la nación se encuentra con un desempleo que supera el 9% y una severa crisis económica que se agudizará con los nuevos recortes presupuestarios de 38 mil millones de dólares, según se anunció recientemente.
Por otro lado, la otra cara de la moneda… La tasa de pobreza en Estados Unidos se ha elevado a su nivel más alto en 15 años, mientras que el número total de estadounidenses que viven en la pobreza alcanzó su marca más alta desde 1960, de acuerdo a un informe entregado por el gobierno en septiembre de 2010. Más de 44 millones de personas de un total cercanos 309 millones viven en la pobreza en Estados Unidos, y la tasa neta de pobreza llega al 14.3%.
La cifra de pobres en edad de trabajar subió al nivel más alto desde los años 60, demostrando que esta crisis ha dejado a millones de personas sin empleo: uno de cada siete estadounidenses está en la pobreza. Uno de cada cinco niños estadounidenses vive en la pobreza, como parte de esos 44 millones de personas que están en la miseria de acuerdo a lo informado por la Oficina Nacional del Censo en su informe anual sobre el bienestar económico de los hogares de Estados Unidos.
El número de personas que carecen de seguro de salud aumentaron de 46.3 millones el año 2008 a 50.7 millones el año pasado, principalmente debido a la pérdida del seguro proporcionado por el empleador. El Congreso aprobó este año una reforma a los planes de salud para extender la cobertura a más gente, pero las principales disposiciones no entrarán en vigor hasta 2014. De acuerdo a los datos del Censo: la pobreza en la población en edad de trabajar entre 18 y 65 años, aumentó de 11.7 por ciento al 12.9 por ciento, la tasa más alta desde 1965. Este es el cuadro que presenta la potencia americana del norte, situación que puede ser más difícil en Centro y Sur América.
¿Qué podemos hacer ante este cuadro? Que nuestro mundo tenga un cambio de conciencia, no sólo sus habitantes, sino sus gobiernos y también sus religiones, llegar a un momento en que las divisiones y las prioridades sean remplazadas por verdaderas formas de vivir. Eliminar ejércitos, eliminar todo el armamento del mundo, eso sería digno de una sociedad evolucionada y no de una que sigue la decadencia espiritual. No existiría el hambre, la pobreza, utilizaríamos el presupuesto para esos fines, así se tendría alimento para todos los continentes. Es inaudito pensar que la raza humana tenga la necesidad de armamento nuclear para "protegerse" de ellos mismos, por utilizar sus recursos indebidamente los cuales nos conducen a las confrontaciones que requieren del armamento como remedio a nuestras intolerancias... es que hemos olvidado que somos todos una sola esencia, si dañamos a otros nos dañamos a nosotros mismos.
¿Qué podemos hacer ante este cuadro? Que nuestro mundo tenga un cambio de conciencia, no sólo sus habitantes, sino sus gobiernos y también sus religiones, llegar a un momento en que las divisiones y las prioridades sean remplazadas por verdaderas formas de vivir. Eliminar ejércitos, eliminar todo el armamento del mundo, eso sería digno de una sociedad evolucionada y no de una que sigue la decadencia espiritual. No existiría el hambre, la pobreza, utilizaríamos el presupuesto para esos fines, así se tendría alimento para todos los continentes. Es inaudito pensar que la raza humana tenga la necesidad de armamento nuclear para "protegerse" de ellos mismos, por utilizar sus recursos indebidamente los cuales nos conducen a las confrontaciones que requieren del armamento como remedio a nuestras intolerancias... es que hemos olvidado que somos todos una sola esencia, si dañamos a otros nos dañamos a nosotros mismos.
Es hora de dar a Dios lo que es de Dios… para que haga su obra y milagro como el de los panes y peces... ¡comida para todos!